Mi Nueva Diversión del Español

Estos días escucho por rutina los programas radiales de los países hispanohablantes, ya que puedo conectarme con facilidad por internet.

Me he conectado con las radiodifusoras desde México, pasando Centroamérica, hasta la Argentina, incluyendo España.

Entre los centros citados, mi favorito es "Caracol Radio Bogotá" de Colombia, cuya directora Diana Calderón sigue escribiendo los artículos para el periódico español "El País".
Aunque traté de leerlos, eran dificilísimos con muchos metáforos e insinuaciones, aparte de porque no sé mucho de la situación actual e historia de Colombia.
En sus programas hay varias discusiones políticos y diplomáticos, sin embargo, a menudo mientras uno habla, los otros toman la palabra simultaneamente, así que no siempre entiendo la discusión.

Otras difusoras interesantes son la de Asunción de Paraguay en que se habla el guaraní mezclado con el español, la de Montevideo de Urguay que nos presenta varia música latinoamericana.
También tengo interés por la noticia de México y de Argentina donde yo vivía.

Se encuentran los ídolos o favoritos de radio, entre los cuales se escucha la voz de Nicolás en La Paz, el locutor protagonista muy popular por su franca opinión sobre cotidiana vida política y economica, en que en los fines de hace dos años le telefoneaban llamádole "¡Don Nico!".

Finalmente, fue superemocionante que pasara los meridianos con la visita del año nuevo en corto plazo.
Al mediodía en Yokohama del primero de enero, en Buenos Aires era la medianoche, la hora del comienzo del año nuevo, luego a las trece, catorce y quince aquí, comenzaba el año nuevo en La Paz, en Bogotá y en la Ciudad de Mexico, respectivamente.
Mientras empezaban la cuenta atrás en cada país, difundía varia música latinoamericana, y posiblemente los personales en los estudios bailaran.

Sin falta, ha sido una nueva manera de disfrutar del español.